Psicoanálisis con niños. Masoquismo primordial: ¿Dónde esta papi?

Que lo baile que lo baile… Edipo-Camps. Destinos lejanos.

Otoño, a poqueta nit una barbacoa, casa a orillas del mare-mar, cenita, llega la gente: un americano, de esos que se pierden por aquí, un parejita inglesa, los sempiternos deuchland, unos super-aseados sudacas, preciosos, a casa de los Sres.

La conversación fluida, la barbacoa fumigant tot l’entorn. “muy agradable”, tutus happys, els deuchland, god god, el ianki, y los ingleses very nice, very lobeli, veri fanni, veri, veri, veri… total, que lo fluido, del lado de los hispanos. La que se ha montado! Dicen, venimos exiliados aquí por eso de las dictaduras bananeras, y ahora esto!, pelotudos corruptos de mierda (en argentino). 15.000 iardas de viaje submarino huyendo de esa bazofia por represalias contra nosotros, y ahora esto! Los Sres, políticamente correctos, derivan la conversación a que expliquen “la experiencia vivida al otro lado del mundo”, cuando y de repente se oye:

Curreteeeeee, curreteeee, ven que vamos a la piscina. Curreteeeee (en perfecto madrileño). Ching, chis, puertas de jardín abierta, y currete con su mami a la pisci… y de fondo una musiquita: que lo baile que lo baile…

Los sudacas contando lo que les ocurrió, con tanta pasión que no se entiende nada, imposible de inscribir. Los deuchland, dale que te pego, hablando en alemán que nadie comprende, impasible desaliento. Los ingleses a los suyo, que más o menos se entiende, i d’ont now… meivi (eso de quizá o puede ser en inglis que le tienen afixion) i el ianki, chapurreando indio-castellano: estar bonito la ciudad de las piedras, la american’s camps, el biopork, las towers, el open Rita. Mi ser guapa valencia, y enjoy mar y pinos (son palmeras, pero bien). La paela, los berd and chips fritos, d’ont worry, be…, y de repente se oye.

Mamá (una voz babosa) uauaasiungun… cerveza. Voyyyyyyy!

En la mesa un encanto de chiquillo, 20 años, el hijo de los sudacas: Sra, y eso del psicoanálisis?, Si?, El psicoanalista por lo que hablamos, puede saber lo que pensamos o somos?. La Sra, más poli-que-correcta, Y eso? El joven, cogiendo carrerita: el complejo de Edipo que tenemos, los desengaños de amor, las manías… El chiquillo es de ciencias!

Y de repente se oye: Mamáaaaa la cena… Ya va (en correcto madrileño). Curreteeeeee, curreteee, dónde estás. Ruido de platos, cubiertos… y de sonsonete al fondo la retrasmisión de fútbol por tevi, no se sabe si 1-4 o 6, pero non-prisa-plus.

Los guiris cada vez más lanzados por el vino, que les pierde, los Sres con cerveza, y el joven, botella de agua sin alcohol, mientras sus padres siguen con la hystoria interminable de las dictaduras, tatata ta-ta-ta. El joven: Sra, y también puede saber el psicoanalista lo que le va a pasar a alguien?. La Sra que esta hasta el gorro de tanta movida guirilín, tanta megalomanía de Camps, queriendo un retrato con Obama… y tanto destarifo dictatorial sainetero confundiendo beicon con cerdo, deja el post que lee de news-online, se sienta, mira al joven y le dice: no lo oyes?, el qué? dice el jovencito. La señora indica con la mano al sitio del que vienen las voces… Ah si! es la champion. La Sra dice: nooooo, mira dicen Curreteeeee, mamá…, Si! es el hijo de los vecinos. Ah! contesta ella. Y los ves todos los años?. Claro.

Pues observa. Curreteeeee, no es el que dice mamá, de hecho a Curreteeee ni se le oye, el que dice mamá parece ser el padre de Curreteeee. Habrá que pensar seriamente, si al niño le da por pegar a otros o ser pegado, si le da por trabajar o por hacer el vago, pues eso de llamarle Curreteeee, y oír al padre decir mamá como si fuera su hermano… En ese momento y de repente otra vez: mamaaaaa el postre!... voy!.

Y con la voz atronadora de su juventud, se gira el chiquillo y sin pensarlo: papaaaaa, curreteeeee dónde esta tu papa?!

Silencio, ni la tivi se atreve a chistar. La Sra sonríe al joven.

Los guiris piden muy interesados la traduction (en inglish, lengua mater por ahora)… y estallido de risa de todos los que no son guiris, ni de DEU, ni de Madriz, y cantan: que lo baile que lo baile… canción que le ponen a curreteeee para que no diga ni mu!. O tal vez será un golfete-pandillero bailarín, pirsinguero de OT. Los guiris de la desunión europea desesperanzados…, mientras el primero que se recupera del ataque de risa, el joven, dice: jajajaja-stop, es un masoquista primordial, el clon de Camps!, curreteeee que lo baile que lo baile… (y sin imutarse, traduce a los guiris y ianki, lo que ha dicho)…

Teresa Ferrer

Nota de la narradora: quien no sapia que es “que lo baile que lo baile” buscarlo en geogle-of-record.